El Estrecho de Magallanes puesto en valor en España

Transcurrieron 501 años pero la travesía del navegante portugués Hernando de Magallanes, considerada la primera vuelta al mundo, todavía concita hoy admiración y pleitesía.
Bajo este prisma, los doctores José Luis Marcello y Barriada y José María Sanz-Hermida de la Universidad de Salamanca, una de las más prestigiosas del mundo, hicieron una enjundiosa investigación que devino su libro ‘Chile y el Estrecho de Magallanes’.

Presentada en la Casa de América de Madrid, se trata de una obra con textos minuciosos de la travesía, ilustrados con una colección de lujo de los fondos cartográficos de la Biblioteca General Histórica de la Universidad de Salamanca.

‘Tres piezas fundamentales integran esta obra, el propio Estrecho de Magallanes, los Países Bajos y sus mapas, y el archivo de nuestra universidad para describir la primera navegación por la Nariz de la Antártida’, reflexionó el catedrático Marcello y Barriada.

Méritos igualmente para Juan Rodríguez de Fonseca, un eclesiástico y político español que fue el cerebro de la expedición y programó todos los detalles del viaje, precisó el experto.

Una hazaña de la que sobrevivieron apenas 18 tripulantes de la embarcación comandada por Magallanes y el español Juan Sebastián Elcano, quien completó la travesía en 1522 ante la muerte del también conocido como Fernando de Magallanes.

Antes, en noviembre de 1520, el explorador portugués había logrado la proeza de deslizar su barco por los canales de la Patagonia y descubrir así lo que fue bautizado luego como el Estrecho de Magallanes.

La aventura marcó hitos en la historia de la humanidad, desde desmitificar la idea de que la Tierra era plana hasta la conexión posible entre los océanos Atlántico y Pacífico, junto con el acceso hacia el Continente Blanco, la Antártida.

Posteriormente, despertaría el interés de un joven inglés que viajaría a la zona en el barco HMS Beagle en 1831. Allí, Charles Darwin comenzó a desarrollar la teoría de la evolución de la especie humana.

Un ameno coloquio en el que participaron además el embajador Enrique Ojeda, director general de Casa de América; Emilio Gilolmo, presidente de la Fundación Chile-España;, y Roberto Ampuero, embajador de Chile en España, entre otros. <tablestyle=”width: 100%;”>                                   

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