Factor entre dos
Por: José Efraín Caballero Sevilla
El proyecto del gobierno federal, de lograr la independencia y autosuficiencia en la producción energética, particularmente en gasolinas y diesel, se encuentra muy cerca de lograr sus objetivos, al haber adquirido una importante refinería en los Estados Unidos.
Pemex, contaba con la participación antes de esta operación, de casi el 50 % de las acciones de la refinería Deer Park, ubicada en Texas, Estados Unidos siendo copropietario de la que es la sexta más grande refinería en los Estados Unidos.
Pese a que Pemex era dueño de la mitad de las acciones, desde 1993 era operada y administrada según establecieron en los contratos, por la compañía Holandesa Shell.
El inicio de las operaciones de la refinería, se dio, en época donde Carlos Salinas fuera el mandatario de México, y por increíble que parezca, se tomaron decisiones contrarias al interés nacional, en este y otro periodo sexenal.
Trasciende, que las ganancias que correspondían a Pemex por esta inversión, eran reinvertidas en su infraestructura, lo que le generaba cero ganancias a nuestro país.
Cabe señalar, que igualmente en otra acción contraria a los intereses de Pemex, en junio del 2011, Pemex cedió los derechos del .005 por ciento de sus acciones en Deer Park, a la compañía Shell, perdiendo así el 50% que tenía en acciones, siendo en esa época presidente Felipe Calderón, afectando de esta manera la toma de decisiones de Pemex en la refinería.
Es en la presente administración de Andrés Manuel López Obrador, que se ha logrado revertir ese negocio nada lucrativo para el país, obteniendo ese restante 50% de las acciones, logrando ahora el control administrativo de manera integral y los beneficios económicos que se lleguen a generar de parte de la empresa.
El propósito de esta inversión, así como la construcción de la refinería de dos bocas, es reducir los precios de las gasolinas a los consumidores mexicanos, comercializándola al costo de producción y operatividad, sin carácter de lucro, enfocándose a satisfacer la demanda, siendo una inversión pública y no privada.
Las empresas particulares, forzosamente buscan grandes utilidades en la venta de sus gasolinas, mientras que la empresa pública Pemex, buscaría comercializarla sin ánimo de generar sobreprecio, en el entendido que los dueños son los ciudadanos mexicanos, al ser una empresa productiva del Estado.
En otro orden de ideas amigo lector, le he de comentar que encontrándose ya muy cercanas las elecciones, es de trascendental importancia el acudir a sufragar el voto por el partido que usted haya decidido darle su rúbrica.
Es muy importante el rumbo que ha de darse en el país, y usted como ciudadano, es el equivalente a un accionista en esta empresa que es México, y debe de tomar decisiones sobre a quién le va a encomendar la dirección de la misma, ya que lo que acontezca, le generará beneficios o perjuicios, según como se de la administración en los próximos años, así que tome su asiento en la toma de decisiones y acuda a votar este 06 de Junio.
Querido lector tenga un excelente día, nos leemos la próxima.
Contacto: factorentredos@hotmail.com