S E N D E R O
Por Efraín Caballero Salazar.
Cd. Victoria, Tam. Esto mismo es una burla para la Capital de Tamaulipas que se ha calificado como uno de los peores Presidentes Municipales que todo este tiempo se le vio solamente con sus bailables predilectos, olvidándose de su compromiso y promesas de campaña, de hacer de Ciudad Victoria funcional en todos los sentidos con bienes y servicios públicos que nunca llegaron.
Y así todo indica por medios electrónicos y escritos que todos los reclamos así como protestas se fueron al vacio, una de estas precisamente el pasado lunes día de su informe en las mismas instalaciones de la COMAPA por sus propios empleados.
Pero la Población o Ciudadanos, todo este tipo de hechos por el Presidente Municipal XICO, ya lo tienen calificado “NUNCA SE QUISO A CIUDAD VICTORIA” y de sus promesas engañosas ya no habrá tiempo de cumplirlas.
Pero esto podrá seguir las diferentes colonias que siguen estando más afectadas sobre todo sin agua, calles en mal estado, inseguridad se encuentran en un estado de intranquilidad y agitación, pudiendo hacer crisis en cualquier momento está desde luego explosiva.
Y lo peor con un Presidente Municipal apático y gris hasta en su propio informe pues así ha sido calificado, sin soluciones donde al parecer no quiere saber ya nada y solo esperara la próxima elección para su cambio si es que no se exige antes.
Lo anterior para retirarse sin gloria ni honor, siendo estas las expresiones de los dolidos colonos, por un Presidente que se perdió en un laberinto y se les soltaron las riendas no de sus caballos sino más bien de su compromiso con el pueblo.
En fin la situación no es diferente desde el principio los tornados lo tomaron en el centro no hubo un día hasta el momento que favoreciera a XICOTENCATL GONZALEZ URESTI.
El caso es que se mancho la alfombra en actos no aptos para cardiacos, pero espere valdrá la pena ya está cerca la próxima elección busque sus candidatos a fin de que no se vuelva a equivocar, mientras tanto califique el informe si es que lo hubo.
La mitad del mundo político lee sendero la otra mitad no sabe leer.