El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que sufrió un “terrible calvario” durante su juicio político, en su primera declaración pública tras ser absuelto ayer por el Senado.
Dijo que “algunas personas muy deshonestas y corruptas” lo habían hecho pasar “por un terrible calvario”, unas declaraciones que hizo durante su participación en la cita anual del Desayuno de Oración Nacional en Washington, transmitido por televisión.
El evento, que reúne a la clase política de la capital estadunidense, se celebra el primer jueves de febrero desde el año 1953.
“Ellos han hecho todo lo posible para destruirnos y al hacerlo le han provocado una grave herida a nuestra nación”, agregó.
“No me gusta la gente que utiliza sus creencias como justificación para hacer algo que saben que está mal”, expresó Trump en un comentario aparentemente dirigido contra Mitt Romney, el único republicano del Senado que votó a favor de condenarlo los cargos de abuso de poder y obstrucción al Congreso.
“Tampoco me gusta la gente que dice ‘rezo por ti’ cuando saben que eso no es así”, dijo Trump, en una clara alusión a la presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien ha dicho en reiteradas oportunidades que reza por el presidente.
“Mucha gente ha resultado herida y no podemos permitir que eso continué”, agregó antes de decir que profundizaría sobre este asunto en una declaración que dará más tarde en la Casa Blanca.