Casi la totalidad de las plazas eran ocupadas por personal de confianza, en puestos que van desde chofer hasta director general, pasando por técnicos, analistas, enlaces, subdirectores y directores generales adjuntos.
“Nos dieron un ultimátum para que nos fuéramos en marzo. Algunos nos esperamos, pero llegó una nueva directora en mi área y decidió que yo ya no iba a estar”, contó Jorge Alberto Mendoza, quien hasta el 15 de junio era gerente de Administración de Proyectos Estratégicos en Banobras.
Del 1 de diciembre al 15 de mayo, la Secretaría que reportó mayor número de renuncias es la de Hacienda con 3 mil 129 bajas que equivalen al 59.2 por ciento de toda la plantilla laboral autorizada, la cual es de 5 mil 280 puestos de trabajo.
La segunda entidad con más renuncias reportadas es el SAT con 3 mil 53 empleados -casi todos de confianza- que equivalen al 8.9 por ciento de las 34 mil 58 plazas con las que cuenta.
En la Presidencia han dimitido 525 servidores públicos, que representan el 39.5 por ciento de los mil 326 puestos de trabajo autorizados en el Presupuesto.
Entre quienes presentaron su renuncia están 8 directores generales, 27 directores adjuntos, 29 directores de área, 19 coordinadores de dictamen, 145 enlaces de alto nivel, 105 jefes de departamento y el titular del Órgano Interno de Control.
** Migra tras despido
Juan Carlos Martínez era director en la Secretaría de la Función Pública, donde ganaba 46 mil 239 pesos mensuales, pero con la nueva Administración le informaron que sus servicios ya no eran requeridos.
“Con mentiras dijeron que yo estaba renunciando; al final sí me dieron mi cheque”, dijo.
Decepcionado por le trato de la nueva Administración encabezada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, por quien votó el 1 de julio, Martínez se fue a Los Ángeles a iniciar una nueva vida trabajando en la industria de la construcción, donde sus ingresos son variables, aunque no reveló a cuánto ascienden.
“Hay mucha desigualdad en el País y mucha corrupción, voté por un cambio, pero el amiguismo y el compadrazgo sigue enraizados”, afirmo.
** Recorte discrecional
Cinco meses después de haber sido despedido, Juan Carlos Martínez, ex director de área en la Unidad de Política de Contrataciones Publicas de la Secretaría de la Función Pública (SFP), fue liquidado.
El 16 de junio le entregaron un cheque de 237 mil pesos por 10 años de servicio, y lo hicieron firmar su renuncia.
“Ellos argumentan que fue por un asunto de economía, por este famoso 20 por ciento de recorte en las plazas, pero es mentira, porque mi plaza no fue recortada, mi plaza como tal fue transferida a la Secretaría de Hacienda.
“De hecho, al día siguiente que a mí me corren la ocupó otra persona y fue transferida mi plaza ocupada por otro”, indicó.
Martínez era el encargado de procesar la información de Compranet, plataforma del Gobierno federal en la se publicitan las compras públicas.
El 22 de enero, cuando llegó a su lugar de trabajo se encontró con que la computadora y el teléfono que tenía bajo su resguardo no estaban, y un guardia le dijo que ya no podía permanecer en esa área y debía presentarse en Recursos Humanos.
“La directora de Recursos Humanos se aventó la puntada de decirme: ‘híjole, discúlpame, regálame tu renuncia y te prometo que te pago la quincena completa’. ‘Uff qué gran favor me hace’, le dije, ‘esto no es así’ y me fui”, recordó.
Buscó empleo en el país pero no encontró, por lo que decidió migrar a Estados Unidos, donde trabaja en la colocación de vigas y estructuras”.
“Estamos tan acostumbrados de siempre favorecer al amigo, más que favorecer a la institución, mi plaza la querían para un amigo, de eso no tengo duda”, señaló.
** Pegan bajas a Banobras
Los despidos en el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) han sido discrecionales y pese a que el argumento fue el recorte de plazas por el tema de la austeridad se ha contratado a nuevo personal, indicó Jorge Alberto Amador, ex gerente de Administración de Proyectos Estratégicos.
“Había habido una disminución de estructura, al menos yo la había visto así, de gente muy capaz, de gente con mucha experiencia en el banco, que hace bien las cosas, porque esa parte sí me consta, que hacían bien las cosas, que era gente generosa, que era gente que sabía su chamba, pero llegaron los recortes”, dijo.
Entre las personas que fueron despedidas se encuentra el propio Amador, que tenía tres años trabajando en el banco y quien fue notificado simplemente que sus servicios fueron concluidos, por lo que salió de la institución el pasado 15 de junio.
“A mí la verdad sí me trataron bien en la salida, porque me notificaron previamente, porque a la mayoría de la gente el mero día, el mero 15 o el mero 30, llegaban con dos de seguridad atrás y les presentaban el escrito y agarra tus cosas y adiós”, relató.
La salida de personal con experiencia, consideró Amador, ha impactado de manera negativa en el desempeño del banco, pues durante el primer semestre del año no coloco ningún crédito.
“La falta de experiencia y capacidad de la gente que está llegando ha dado como consecuencia que no se haya colocado un solo crédito en lo que va de diciembre a junio.
“No se ha colocado un solo crédito, y el banco vive de la colocación de créditos”, dijo.