El Banco de México (Banxico) mantiene una postura de prudencia y de cautela, debido a que está consciente de que los temas ligados a los aranceles y a las acciones de las calificadoras, con respecto a México y a Pemex, siguen siendo un riesgo.
En entrevista con El Financiero, Alejandro Díaz de León Carrillo, gobernador del banco central, afirmó que la decisión de política monetaria que anunció este jueves la Junta de Gobierno, de mantener en 8.25 por ciento la tasa de referencia, es la más conveniente para la realidad de la economía mexicana.
“Si bien es importante el acuerdo que se logró con Estados Unidos, lo que ha mitigado el factor de riesgo, esto puede cambiar; tenemos que ser conscientes de esto y, también, con el tema ligado a las acciones de las calificadoras. Digamos que seguimos con cautela, con prudencia y, los riesgos, tanto al alza como a la baja, se han modificado y se han incrementado”, subrayó el funcionario.
Díaz de León enfatizó que la Junta de Gobierno entiende que la disyuntiva para la política monetaria se presenta compleja, por eso el énfasis en descansar mucho de lo que hagan hacia delante en función de la información adicional que tengan, ya sea que pueda dar lugar a mayores o menores presiones de inflación.
“Debemos de estar atentos a lo que requiere la economía mexicana hacia delante y en ese sentido consideramos, la mayoría de los miembros de la Junta, en mantener la tasa en 8.25 por ciento y estar muy atentos a qué riesgos se materializan”, aseveró el gobernador del banco central.
Sobre el voto disidente, Díaz de León reafirmó que tener una Junta con diferentes puntos de vista enriquece y fortalece la toma de decisiones. En dos semanas, dijo, se tendrá el detalle de la minuta, donde vendrá la identidad del voto disidente y el subgobernador tendrá oportunidad para explicar los motivos con los que fundamenta esa decisión.
Cuestionado sobre la posible flexibilización monetaria en Estados Unidos, apuntó que estarán siguiendo con atención las acciones de la Reserva Federal (Fed), pues los mercados se han adelantado a que disminuya su tasa de referencia y eso va a contribuir a disminuir la presión o tensión sobre los mercados financieros, principalmente en el peso frente al dólar, y en diferentes rangos de la curva de rendimiento de las tasas en México (reducción de la tasa de interés a diferentes plazos).
Luego de conocerse el comunicado de política monetaria, los rendimientos implícitos en el mercado apuntan a que la tasa de referencia de Banxico se pueda ubicar en 7.17 por ciento dentro de 12 meses, según los datos de Bloomberg.
De cumplirse dicha expectativa, implicaría prácticamente una reducción de 100 puntos base con respecto a su nivel actual.
En el comunicado se pueden observar ligeros cambios en el tono de Banxico, ya que muestra una mayor preocupación por el crecimiento de la economía, al sostener que el balance de riesgos en esta materia “se ha tornado más incierto y ha ampliado su sesgo a la baja”.
La postura del instituto central es más enfática en la pérdida de fuerza de la economía que en su postura anterior, al introducir la palabra “ampliado” en este comunicado.
En contraste, la percepción en materia de inflación se suavizó un poco, aunque se mantiene de cierta manera cauteloso, al sostener que “persiste un alto grado de incertidumbre en los riesgos que pudieran influir en la inflación”.