El viceministro de Exteriores ruso indicó que estas acciones tienen como principal objetivo “dañar la seguridad” de Rusia.
Rusia dará “una respuesta militar” a la amenaza en relación con el despliegue de misiles de largo alcance estadounidenses en Alemania, declaró este jueves el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Riabkov.
“Sin nervios, sin emociones, elaboraremos en primer lugar una respuesta militar a la nueva amenaza”
De acuerdo con sus palabras, las acciones de EE.UU. “tienen como principal objetivo dañar la seguridad de nuestro país”. Sostuvo que los pasos en cuestión representan “uno de los elementos de intimidación, que hoy es casi el componente principal de la línea de la OTAN y Estados Unidos hacia Rusia”.
“El carácter de nuestra respuesta se determinará con calma, de manera profesional”, indicó Riabkov en el marco del X Foro Parlamentario de los países de los BRICS que tiene lugar en la ciudad rusa de San Petersburgo.
Despliegue de sistemas de ataque en Alemania
EE.UU. desplegará armas hipersónicas en un país europeo
Este miércoles, el Gobierno de EE.UU. y Alemania anunciaron conjuntamente que Washington comenzará a desplegar sistemas de ataque de largo alcance, incluidas armas hipersónicas, en territorio alemán para 2026.
“EE.UU. comenzará a desplegar de forma esporádica las capacidades de fuego de largo alcance de su Fuerza de Tareas Multidominio en Alemania en 2026, como parte de la planificación para el estacionamiento permanente de estas capacidades en el futuro”, reza el comunicado compartido por la Casa Blanca.
Así, se afirma que este armamento incluirá SM-6, misiles de crucero Tomahawk y armas hipersónicas en desarrollo, las cuales “tienen un alcance significativamente mayor” que las desplegadas actualmente en territorio europeo. Los misiles Tomahawk tienen un alcance de hasta 2.500 kilómetros con una velocidad de menos de 900 kilómetros por hora.
Por su parte, el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, dijo este jueves que las armas estadounidenses “llegan a Alemania de forma rotatoria”. Esto está “claramente vinculado a la expectativa de EE.UU. de que nosotros mismos invirtamos en el desarrollo y la adquisición de tales armas de [gran] distancia”, afirmó.